Jesús compañero y amigo,
haz de nosotros instrumentos de tu paz,
donde hay odio, pongamos amor,
donde hay ofensa, pongamos perdón,
donde hay error, pongamos verdad,
donde hay desesperación, pongamos esperanza,
donde hay tinieblas, pongamos tu luz,
donde hay tristeza, pongamos alegría,
donde hay egoísmo, pongamos generosidad.
Que no busquemos tanto
ser consolados como consolar,
ser comprendidos como comprender,
ser amados como amar,
ser ayudados como ayudar.
Porque dando se recibe,
olvidando se encuentra,
perdonando se es perdonado,
muriendo se resucita a la vida eterna.
San Francisco de Asís