No se como resumir en pocas letras está experiencia tan linda y tanta gracia recibida en el EJI.
Para empezar el EJI es el Encuentro de Jóvenes Ignacianos que se realizó en la ciudad de Córdoba el 21 y 22 de julio.
Este encuentro fue dirigido a la Provincia Argentino-Uruguaya de la Compañía de Jesús, nucleando jóvenes de todas sus redes ignacianas; con los cuales compartimos muy buenos momentos de oración, música, risas y reflexión.
Dicho de esta manera no tiene nada de especial. Pero en realidad, el EJI fue un fin de semana distinto en el que por un lado nos dimos cuenta que somos parte de algo mucho más grande, y por otro lado nos encontramos con un montón de jóvenes que le quieren decir SÍ a Jesús en su vida, pero no de cualquier manera, sino al modo de San Ignacio, «buscando y hallando la voluntad de Dios» en nuestro camino.
No todos los días uno se encuentra rodeado de mucha gente que tiene su mismo sentir y con las mismas ganas de abrazar la Fe desde la espiritualidad que día a día roba mi corazón.
Creo que la imagen que elijo para darle a este EJI, es la de «Camino»; el cual como «Peregrinos» siguiendo los pasos de Ignacio decidimos emprender cada uno en su ciudad y grupo, pero que durante ese fin de semana esos caminos se cruzaron, para «Mayor Gloria de Dios»
«ESCUCHARTE PARA CONOCERTE, CONOCERTE PARA ELEGIRTE«
Este fue el lema que nos acompañó todo el fin de semana vivido; un lema embebido de la espiritualidad que nos identifica y convoca.
El lema nos fue marcando el camino, y creo que de él me llevo dos grandes reflexiones:
- Todos estamos llamados, sólo hay que estar dispuestos e «indiferentes» para escucharlo.
- Y que sólo el «conocimiento interno de Jesús», al pasar por nuestros corazones su «Modo de proceder», nos ayudará a discernir entre las «mociones» o voces que acontecen en nuestros corazones, para poder elegirlo y seguirlo.
El Resucitado en su forma Eucarística se hizo presente en nuestro peregrinar y lo «inflamó todo»
No me queda otra cosa que decir que Gracias. Por ser testigo de una forma de amor, que «nos mueve a amar» y a dar nuestro “Magis” en la construcción del Reino de nuestro Rey Eternal. Gracias Señor.
Luciano Acosta
Encuentro Juvenil Ignaciano
Córdoba 2018